martes, 23 de noviembre de 2010

La felicidad de un equipo

A veces, hay cosas que no dejan de impresionarte, ni te quitan la felicidad cuando ves que los que están a tu lado son felices.

Mi chico juega al balonmano. Desde los 10 años no ha dejado de hacerlo, pese a lesiones y contratiempos. Ahora, pasados los 30, sigue haciéndolo en un equipo al que envidio, y no sólo por sus resultados.


Cuando ves el entrenador de cualquier equipo, lo que suelen decir es que quieren un equipo unido. Y este equipo de balonmano es el equipo que más unido he visto en cualquier competición de cualquier deporte. Y los que me conocen bien, saben que he visto mucho deporte. Soy, como dirían, una espectadora sin remedio.


Y en este caso, envidio el como se llevan, dentro y fuera del campo. Envidio todos y cada uno de los buenos momentos que veo vivirles. Y de los que poco a poco también yo voy formando parte. Envidio sus bromas, envidio el buen humor que se respira, y envidio también el cómo se levantan el ánimo en los momentos menos agradables de cada uno.

Este post va por todos ellos. Porque sin ellos saberlo, hacen que su felicidad se contagie. Hacen que los que vamos a ver sus partidos, nos sintamos cómplices tanto del resultado obtenido como del mismo equipo. Son los mejores, aunque su categoría a veces no lleve a pensarlo.


La unión hace la fuerza... y ellos están terriblemente unidos. Y desde aquí, aunque ninguno de ellos lo lean, les doy las gracias por transmitir a todo el que se acerca, esa gran felicidad.

1 comentario:

diciendosindecir dijo...

Tú, también contagias con tu forma de ser felicidad, paz, comprensión y una infinita gama de adjetivos, todos ellos buenos, hacia tu persona.
Por todo lo que has sido, eres y serás...
Por todo ello, yo... te Admiro!!!!
Infinitos besos.
Clara.