Montanhes araneses

Aqueres montanhes que tant nautes son
m'ampèishen de véder mèns amors a on son.

Nautes se son nautes ja s'abaisharàn
es mies amoretes que s'aproparàn.

Montanhes araneses a on es pastors
es hònts regalades tròben, e jordons.

Montanhes coronades tot er an de nhèu
tant nautes e bères que vos pune eth cèu.

Nòsti amors veiguéretz com rosèr florit
volem coma es pares guardant-vos morir.

Para ti tío Andreuet, estés dónde estés.

Cáceres - Madrid - Toledo

Qué bien me han ido estas vacaciones.

Primer destino: Cáceres, para pasar un par de días con Sergio, olvidarnos de que el resto del mundo existe y hacer un poco lo que nos ha dado la real gana. Hemos reído, he llorado, hemos comido, hemos bebido, hemos bailado, hemos visto fútbol... un poco de todo, como debe ser. Gracias Sergio... gracias, por todo, ya sabes cada una de las cosas que te he dicho, y sabes que las pienso. Y sí... ¡te quiero!


De vuelta pasé un día y medio en Madrid... la capital siempre sirve para ver a buenas amigas, y eso hice esta vez. Todas se portaron de lujo, y yo que se lo agradezco de todo corazón.

Y para terminar, dos días en Toledo. Preciosa ciudad, y mejor aun la compañía. Por fin pude ver el Hospital de Tavera. Ole ole... la emoción me embargó! Como siempre, mucha cañita fresquita, mucha tapita... eso es vida!!

Han sido unas vacaciones inolvidables dónde he mezclado de todo: pareja, amistad, risas, llantos, diversión, calma... han sido realmente, las vacaciones que esperaba que fueran. Gracias a todo el mundo que me ayudó a realizarlas.

Estados de ánimo

Hoy me ha pasado algo curioso. Creo que he experimentado todos los estados de ánimo que puede sufrir el ser humano. Ridícula; Estúpida; Enfadada; Irascible; Feliz; Sonriente; Lacrimosa; Melancólica; Soñadora; Esperanzada; Prudente; Reprochadora; Amada; Dolida; Consolada; Arrepentida... y todos los adjetivos que podáis pensar que son sinónimos de estos que acabo de escribir.

A veces, no es tanto el cómo puedes describir que te sientes, sino el cómo te sientes de verdad. Ha sido un día de perros, que finalmente, como todo cuento de hadas, ha tenido un desenlace feliz. Gracias mi príncipe.