domingo, 16 de septiembre de 2007

Atreyuazo

La vida te da agradables sorpresas. La suya fue una de ellas. Asustadizas, las sorpresas a todos nos gusntan, y a quién diga que no, miente!

Me encontraba yo en mi puesto de trabajo habitual, haciendo lo habitual (que consiste en leer, estudiar...) cuando se plantó en el mostrador y, sin miramientos, me preguntó si yo era yo. Desconcentrada en aquel instante por la pregunta de aquel desconocido, mi cara tuvo que ser un poema. Incluso yo misma, minutos más tarde, noté como mi cara había pasado del blanco inmaculado al rojo intenso.


¡Sorpresa!

Y repito, agradable sorpresa. Agradable cuando imaginé quién era, claro. Yo siempre decía que si algún día lo veía, le conocería. Meeeek! ¡Error! No. No lo hubiera conocido.

El sentirse observado por alguien que te conoce y al que tú conoces pero no esperas, es una situación por lo menos extraña. Y hay que ver cómo se fija la gente. Actos reflejos que luego te recuerdan y que tú creías que no habían visto, seguidos de la frase "la policía no es tonta", tehacen pensar.

Creo que estaría preparada para otro "atreyuazo" (sorpresa de improvisto así bautizada por otro buen amigo y mejor confesor).

Y por favor, no os penséis tanto si entrar o no... que no os voy a comer! ;P

1 comentario:

Anónimo dijo...

Querida Evy... creo que tenemos que ponernos a charlar algún día para que me pongas al día (valga la redundacia) en lo que respecta a tu vida... ummmmmmm... jajaja

Atreyuazo es por Atreyu, el de La Historia interminable? Ays mi Atreyu y mi Bastian...

Me alegro de que fuera una fantástica sorpresa!!

Muackisssssssssssss